Ciudad Juárez ha sido escenario de un preocupante repunte de violencia en las últimas semanas.
Con más de 50 homicidios registrados solo en el último mes, las autoridades locales y federales se encuentran bajo presión para detener la escalada. A pesar del despliegue de más efectivos de la Guardia Nacional y la Policía Estatal, los índices de inseguridad siguen alza.
La población se siente cada vez más vulnerable ante la creciente presencia de cárteles y bandas delictivas, que además de los homicidios, están vinculados a delitos como el secuestro, extorsión y narcotráfico.
Organizaciones civiles han pedido al gobierno implementar estrategias más integrales que incluyan la reconstrucción del tejido social, mejores oportunidades laborales y programas de prevención de la violencia, especialmente dirigidos a los jóvenes.
Aunque el gobierno asegura que está trabajando en estrategias a largo plazo, la población exige resultados inmediatos.